Ritmos de competición

Una de las claves para una competición exitosa es sin duda la capacidad del atleta en ajustar los ritmos en la misma. En muchas ocasiones los ritmos de inicio son demasiado rápidos, con la intención de «compensar» por la «presumible pérdida» de ritmo en los km finales de la carrera. Sin embargo, la forma más eficiente de hacer una buena marca, y también, marca personal, es ser capaz de terminar en los últimos km más rápido que los primeros, y no viceversa. Para ello, es clave no empezar a ritmos que difícilmente serán mantenidos durante la carrera. Lejos de ello, ajustar los ritmos de inicio, e incluso ser prudente, nos ayudará a terminar rápido, y a sacar el mayor provecho y rendimiento de los entrenamientos realizados en los meses previos.

Podemos poner un ejemplo real, de un atleta con mejor marca personal de 1h29´30″, para realizar 1h28´08″ en el pasado medio maratón de Barcelona. Sus parciales, con pulso e indicadores de potencia en cada km fueron los siguientes:

Lap Time pulso med pulso max Power
1 4:23 160 169 259 watts
2 4:12 169 175 269 watts
3 4:13 172 177 274 watts
4 4:16 173 177 271 watts
5 4:10 173 177 270 watts
6 4:10 175 180 275 watts
7 4:06 173 178 270 watts
8 4:08 173 176 269 watts
9 4:04 175 179 271 watts
10 4:11 176 181 271 watts
11 4:10 177 180 272 watts
12 4:13 178 183 274 watts
13 4:09 177 182 268 watts
14 4:15 177 181 269 watts
15 4:12 178 183 270 watts
16 4:13 178 183 268 watts
17 4:13 179 184 269 watts
18 4:20 180 183 272 watts
19 4:03 181 185 272 watts
20 4:09 183 188 273 watts
21 4:04 185 190 281 watts
22 0:15 188 191 317 watts
Resumen 1:28:08 176 191

Claves de los datos:

  • A nivel de pulsaciones; Umbral del atleta en pulso 170-175. El pulso fue mantenido dentro del umbral hasta el km 10, a partir de entonces, tanto pulso como ritmo fue aumentado para terminar el último km en 4´08″ en comparación al 4´22″  del primer.
  • A nivel muscular; Los datos de potencia muscular del atleta dentro del umbral corresponden a 160-165 wattios. La capacidad del atleta para terminar en niveles superiores a los 280 wattios en el último km indican una fantástica gestión de ritmo durante la carrera, además de una adecuada función muscular trabajada en los meses previos con entrenamiento de fuerza.

Ajustar ritmos en competición es clave para poder sacar el máximo rendimiento, tanto metabólico como muscular.

Comenzar la competición a ritmos superiores para intentar compensar la «pérdida de ritmo»  en los últimos km induce a cambios metabólicos hacia metabolismo anaeróbico difíciles de revertir durante la competición. El resultado de una mala gestión de ritmos da como resultado un rendimiento comprometido, y echar por tierra meses de entrenamiento.

 

 

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Luis del Águila

• Doctor en Fisiología.
  (Penn State University, USA).
• Fellowship.
  (Harvard Medical School, USA).
• Licenciado en Bioquímica. 
  (Universidad de Navarra, Pamplona)
• Recordman Nacional Master
• Medallista Internacional Master
• Campeón de España Master
• Campeón Regional Absolut
• Apasionado del Entrenamiento

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