Hemos entrado de lleno en competiciones de carreras populares en España. Vivimos en un País privilegiado, ya no sólo por el clima, sino además por el excepcional cartel de carreras que tenemos durante todo el año en todas las ciudades de España. Sin embargo, ahora que vivo las carreras populares más ¨de cerca¨ que nunca, hay dos factores que me llaman especialmente la atención. Primero, terminamos una carrera, y ya estamos pensando en la siguiente. Es más, yo diría que durante la carrera, ya tenemos en mente cuál será el siguiente. El segundo hecho es la impaciencia por intentar conseguir una marca que nunca llega. Hacer una marca personal no es fácil, implica correr en un tiempo que no hemos corrido nunca antes. Para hacer marca personal tenemos que estar en perfectas condiciones físicas, y además haber entrenado de forma correcta para conseguir el objetivo.
Si nos centramos en el primer aspecto, cuidar la frecuencia de competiciones es fundamental para progresar. Es muy difícil, si no imposible, entrenar durante la semana, si competimos prácticamente todos los fines de semana. Recordemos que el cuerpo necesita al menos 5 días para recuperarse de un esfuerzo máximo, (Paulsen et al. 2012, Exercise Inmunology Review) aunque la distancia sea de 10 km. Por lo tanto, si no recuperamos bien la competición, será muy complicado asimilar el trabajo realizado durante el entrenamiento. Yo creo que a pocos atletas les ¨pone¨ competir más de lo que me pone a mí. Sin embargo, considero que uno de los factores de éxito está relacionado con la selección de competiciones, no más de 8 / 10 al año. Ser exitoso significa ser selectivo…
El segundo aspecto, la obsesión por la marca, hace que nos precipitemos en muchas de las decisiones de nuestro entrenamiento. Si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo ¨Albert Einstein¨. Es imprescindible pensar en el tipo de entrenamiento que estamos haciendo. Entrenar no es fácil, hay muchos aspectos que entran en juego, y cada atleta ha de jugar su propio juego, no todos el mismo. Desde mi punto de vista la clave del éxito de un entrenamiento está en identificar los puntos de mejora, para mejorar a nivel global. Es decir, no es tan clave saber cuántas repeticiones de mil metros tengo que hacer, sino qué tengo que hacer para asimilar de forma óptima esas repeticiones de mil que estoy haciendo. Considero que todos hacemos ritmos controlados, series, días largos, etc. Hay poca variedad en el entrenamiento, sin embargo, pequeños detalles del entrenamiento son los que hacen que el entrenamiento sea exitoso. Hemos de preguntarnos, qué puedo hacer para asimilar mejor mi entrenamiento. Evidentemente hay muchas variables que entran en juego, pero cada uno de nosotros, junto a nuestro entrenador, hemos de identificar esas variables sobre las que actuar para conseguir el objetivo. Con estas ideas en mente, en breve haremos un seminario más práctico que teórico para identificar estas variables. Es una propuesta que he hecho a mi grupo de entrenamiento de Madrid, y con muy buena acogida. La sesión consistirá en determinar esas áreas de mejora de cada uno, para que el entrenamiento sea todavía más eficaz y exitoso.
