Entrenamiento y mejora del rendimiento
Lo primero y más importante en todo proceso de entrenamiento debería ser determinar debilidades de la función muscular (pasos 1 y 2). Sin fuerza no hay carrera, y por lo tanto de nada serviría hacer el mejor plan sin una óptima materia prima, ¨sistema muscular eficiente y óptimo¨. Una vez identificadas las deficiencias musculares hemos de trabajarlas con un adecuado entrenamiento de fuerza (paso 3). Cualquier entrenamiento de fuerza no sirve, y ha de ser individual, específico, y enfocado a mejorar las deficiencias del sistema muscular.